Por aquí abajo la luna se ve con un tono rosaceo muy bonito.Pregunté y me dijeron que era debido a cuestiones metereólogicas.Me jodió saber que era por eso.
Cuando era niña me acostaba en el césped muy a menudo a mirar el cielo. Me preguntaba cómo serían esos astros, y me maravillaba pensar que lo que entraba por mi pupila era, tal vez, sólo la luz de una estrella extinguida.
He perdido esa sana costumbre.
No sé si en el hemisferio sur se vio el fenómeno de la Luna y Júpiter (ya saben, nuestros cielos no son iguales), pero agradezco haberlo conocido por tu foto.
Camino... yo lo miro. Diariamente. Me ocurre como a Mimí... puedo pasar horas observando. Sé poco más que localizar alguna que otra constelación pero imagino mil cosas mirando al cielo. Y me pasa también como a Cristobal, que me suele gustar más lo que yo imaginé...
;-)
ResponderEliminarsí. nos tienen que recordar que miremos al cielo.
ResponderEliminarPor aquí abajo la luna se ve con un tono rosaceo muy bonito.Pregunté y me dijeron que era debido a cuestiones metereólogicas.Me jodió saber que era por eso.
ResponderEliminarUn abrazo.
Bonita luna, ¡Sí señor!
ResponderEliminarCuando era niña me acostaba en el césped muy a menudo a mirar el cielo. Me preguntaba cómo serían esos astros, y me maravillaba pensar que lo que entraba por mi pupila era, tal vez, sólo la luz de una estrella extinguida.
ResponderEliminarHe perdido esa sana costumbre.
No sé si en el hemisferio sur se vio el fenómeno de la Luna y Júpiter (ya saben, nuestros cielos no son iguales), pero agradezco haberlo conocido por tu foto.
Un abrazo Mayte.
Camino... yo lo miro. Diariamente. Me ocurre como a Mimí... puedo pasar horas observando. Sé poco más que localizar alguna que otra constelación pero imagino mil cosas mirando al cielo. Y me pasa también como a Cristobal, que me suele gustar más lo que yo imaginé...
ResponderEliminarGracias a ti, Isla.
Y a Salamandrágora... y a todos
Besos